Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

1

Una versión de este artículo fue discutida en el Seminario de Historia de la Fundación Ortega y Gasset en junio de 1998. Agradezco la atención del profesor Santos Julia y de todos los asistentes. Los generosos comentarios de José Álvarez Junco me han permitido matizar algunas afirmaciones, plantearme otros interrogantes y reafirmarme en mi tesis general. Muchos de los argumentos de este artículo fueron avanzados en «Myths of Failure, Myths of Success: New Perspectives on Nineteenth Century Spanish Liberalism», Journal of Modern History, vol. 70, 4, diciembre de 1998.

 

2

Quizás, el impulso inicial de este artículo resida en la lectura crítica, pero entusiasta, de la obra de D. Ringrose, España (1700-1900). El Mito del Fracaso, Madrid, Alianza, 1996, cuyo título en inglés merece ser recordado, Spain, Europe, and the «Spanish Miracle», Cambridge University Press, 1996. Un buen resumen general del cambio de percepción para toda la época contemporánea en J. P. Fusi y J. Palafox, España (1808-1996). El desafío de la modernidad, Madrid, Espasa, 1997. Véase también, entre otros y previamente, Shubert, A., Historia social de España, Barcelona, Nerea, 1990.

 

3

Julia, S., «Anomalía, dolor y fracaso de España», en Claves de Razón Práctica 66 (1996), págs. 10-22. Algunos de los problemas pendientes al respecto han sido puestos de relieve por Borja de Riquer, en «La historia de un país normal, pero no tanto», en El País, 17 de marzo de 1998.

 

4

Importantes en el diálogo entre la historiografía española y europea fueron, en su momento, las obras de D. Blackbourn and Q. Eley, The Peculiarities of German History. Bourgeois Society and Politics in Nineteenth-Century German History, Oxford, Basil Blackwell, 1984; W. M. Reid, Money and Liberty in Modern Europe. A Critique of Historical Understanding, Cambridge University Press, 1987; C. Mooers, The Making of Bourgeois Europe, Londres, Verso, 1991; y G. Comninel, Rethinking the French Revolution, Londres, Verso, 1987. Véase también J. Morril, The Nature of the English Revolution, Londres, Longman, 1993, y T. C. W. Blanning, The Rise and Fall ofthe French Revolution, University of Chicago Press, 1996. Sigue siendo relevante la crítica a la historiografía revisionista de C. Jones, «Bourgeois Revolution revivified: 1789 and Social Change», en C. Lucas (ed.), Rewriting the French Revolution, Oxford, Clarendon Press, 1991, págs. 69-118.

 

5

Desde ópticas distintas, tres excelentes estados de la cuestión sobre el debate actual en torno a la revolución liberal son los de P. Ruiz, «Un balance global. Del antiguo al nuevo Régimen: Carácter de una Transformación», en A. M. Bernal et al., Antiguo Régimen y Liberalismo. Homenaje a Miguel Artola. Visiones generales, Madrid, Alianza, 1994, 159-191.- I. Castells, «La rivoluzione liberale spagnola nel recente dibattito storiografico», Studi Storici, 1 (1995); 127-161 y J. Millán, «Liberale revolution und sozialer Wandel im Spanien des 19. Jahrhunderts, Ein Literaturüberblick», Neue Politische Literatur, 40 (1995), 381-401. Quedan fuera del objeto directo de reflexión de estas páginas las relaciones posibles entre la quiebra política e historiográfica de la noción de España.

 

6

Así se desprende de la obra de D. Ringrose, España (1700-1900). El Mito del Fracaso..., ob. cit., supra.

 

7

Quizás sea éste el riesgo más evidente de la obra, por otra parte muy útil, de Jesús Cruz, Gentlemen, bourgeois, and revolutionaries. Political change and cultural persistence among Spanish dominant groups (1750-1850), Cambridge University Press, 1996.

 

8

Lo mismo podría decirse de su divorcio del amplio proceso de diseminación del liberalismo en toda Europa occidental que, como muy acertadamente señala Bartolomé Clavero, «trasciende casos y sabe comunicarse desde temprano» (Happy Constitution. Cultura y Lengua constitucionales, Madrid, Trotta, 1997, pág. 42).

 

9

Varela Ortega, J., «La España política de fin de siglo», en Revista de Occidente, 202-203 (1998), págs. 43-77.

 

10

Utilizo la expresión de advertencia de Thomas Hobbes a la Corona cuando, en plena guerra civil, se oponía a las actividades científicas de la Royal Society y a su pretensión de un tipo de conocimiento (y por lo tanto de poder) independiente del poder del Estado. Ver al respecto, que desde otros intereses, la valoración de Bruno Latour de aquel incidente en Nunca hemos sido modernos, Madrid, Debate, 1993, págs. 36-39 especialmente.